Venus en Virgo: lista para retrogradar
Venus acaba de entrar en Virgo y nos preparamos para transitar un viaje hacia adelante y hacia atrás. Dentro de pocos días, exactamente el 25 de Julio, Venus comenzará a retrogradar lo cual hará que vuelva a Leo por un tiempo para reveer ciertos temas que necesitan una segunda oportunidad de revisión y conciencia. Pero ahora, en estos primeros pasos de Venus en Virgo, es importante comprender que la energía central que impulsa este tránsito es el contacto con nuestra más pura naturalidad para relacionarnos desde la inocencia, contemplarndo la sensualidad de la pureza y la transparencia para crear vínculos sanos y estables. Es tiempo de abrirnos a lo nuevo, limpiarnos el maquillaje, hacer contacto con la sencillez y valorar nuestra belleza natural.
Como ya sabes, Venus es el planeta que representa la energía femenina, y se expresa en la forma de dar y recibir amor, goce sensual y cuidado con los demás. El deseo y la atracción, el amor por uno mismo, el erotismo, la autoestima, la belleza y la armonía, son el eje central de esta energía.
Durante su tránsito por Leo, Venus ha tenido un rol protagónico en las energías cósmicas del último mes, porque su fuerza se unió a la de Júpiter y ambos planetas han estado danzando juntos en el Cielo, regalándonos muchísimo brillo y potencial creador.
Ahora, el planeta Yin del Universo deja la energía de Leo para entrar en Virgo y desde allí comenzar un proceso de retrogradación que la devolverá nuevamente a Leo. La fase de Venus retrógrada comienza el próximo 25 de Julio a los 0º de Virgo y terminará el 6 de Septiembre a los 14º de Leo, para luego comenzar a avanzar hasta que el 9 de Octubre llegue a los 0º de Virgo nuevamente.
Venus representa al arquetipo cósmico de la integración de los opuestos, el balance entre energías diferentes que, al mezclarse, forman una nueva entidad. Es la energía de la Alquimia. Es la energía de la integración del Yo con el Otro para crear el Nosotros.
Este ciclo de Venus Retro nos trae un tiempo para replantear nuestros vínculos, nuestros valores al momento de abrirnos al otro para crear lazos de unión. Sobre esto, vamos a hablar más adelante. Porque ahora es tiempo de comprender que no hay nada más bello que la expresión transparente de nuestra interioridad, y que no hay lazo más fuerte que aquel que se construye, paso a paso, con naturalidad y pureza.
Es tiempo de tener bien presente que la calidad del encuentro con el otro se sustenta en la autoestima. Y que la belleza más pura es aquella que irradiamos cuando trabajamos por ser la mejor versión de nosotros mismos, para darnos, brindarnos, ponernos al servicio del encuentro con el otro, y construir juntos un Nosotros real, sano, simple y natural.
Es tiempo de meditar sobre esto y prepararnos para comenzar un proceso de revisión, reflexión y revalorización de aquellos vínculos dejan brotar nuestra más bella naturaleza humana.
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