Marte en Libra
Marte entró en Libra el 12 de Noviembre pasado y transita esta energía de Aire hasta el 2 de Enero de 2016. El emplazamiento de Marte en Libra nos dispone a trabajar en la integración de los opuestos, accionando para equilibrar conscientemente nuestra balanza. La oportunidad central de este transito es el poder crear una alquimia interna entre nuestro propio Yin – Yang, nuestras energías femeninas y masculinas, el Eros y el Logos, el Anima y el Animus.
Marte es el planeta que representa la energía masculina, y su energía se vislumbra en el ser humano a través de la acción, la conciencia del deseo, el impulso y la fuerza para la conquista. Transitando por Libra, Marte nos impulsa a la creación de balance, en pos de conquistar esos deseos de unión y construir vínculos en donde el Nosotros sea protagonista.
Marte es el planeta que rige el signo de Aries, y Libra es su signo opuesto complementario. Al estar este planeta posicionado en el signo de Libra, se encuentra en exacta oposición a su “hogar”, es decir, afuera de su zona de comfort, algo incómodo, exiliado. Esto, trae posibilidad de tensión, porque desde Libra, nuestro guerrero interno va a necesitar ubicar su Yo en favor del Nosotros. Precisamente por ello es que el deseo personal tendrá como protagonista el complemento, la búsqueda de “lo otro” como base para un nuevo equilibrio.
Marte en Libra nos trae la oportunidad de integrar la energía opuesta y complementaria, y comenzar a accionar no tanto desde el impulso sino también desde la estrategia, la armonía, el equibrio. Valorar las relaciones y actuar en favor de la unión y el deseo común es parte de este emplazamiento. Así, Marte en Libra nos deja ver nuestros deseos de complementación, es decir, nos abre la Conciencia para percibir el balance de la energía interna cuando estamos en contacto sano con el Otro, y a partir de eso disponernos, afirmarnos y avanzar hacia una manera de integrar la “otredad”, el opuesto complementario que promueve la alquimia interna.
Se abre la oportunidad de comprender una nueva manera para relacionarnos, cediendo una dosis del individualismo, el propio deseo, para accionar en pos de la energía del Nosotros, el Tú y el Yo desde un lugar equilibrado, buscando la unión con calma, con capacidad de comprometernos con el otro, valorando su Ser ante todo, y promoviendo la activación de relaciones y lazos armónicos con cierta cuota de desapego.