SOLSTICIO DE CAPRICORNIO | Astrología, Simbología y el Nuevo Mundo
Cada 21 de Diciembre (a veces el 22), el Sol se posa sobre el Trópico de Capricornio y se produce el Solsticio de Invierno en el Norte y de Verano en el Sur, la máxima polaridad entre el día y la noche, entre la luz y la oscuridad.
Los Equinoccios y Solsticios son los principales eventos del ciclo solar anual, y conectarnos conscientemente con los cambios que traen a nuestro Planeta nos permiten también profundizar en los procesos psíquicos que atravesamos continuamente los seres humanos. Porque como es arriba es abajo, como es adentro es afuera.
Los Equinoccios y los Solsticios abren ciclos, las 4 estaciones del año, y a la vez son parte de un ciclo mayor de la vida en la Tierra: el viaje de traslación alrededor del Sol (1 año calendario).
Solsticio es una palabra que significa “sol quieto”y marca la máxima polaridad de la luz. Equinoccio significa equilibrio y marca el balance perfecto entre luz y oscuridad.
Cada Equinoccio y Solsticio da inicio a las Temporadas Zodiacales de Aries (Equinoccio de Marzo), Cáncer (Solsticio de Junio), Libra(Equinoccio de Septiembre) y Capricornio (Solsticio de Diciembre).
El Solsticio es la festividad del Sol. Y la historia del Sol para todos nosotros se trata de una sola historia, la única historia: la Luz que, desde el espacio, llega a nuestro Planeta Tierra y crea el Tiempo y la Vida.
En este sentido, cada Equinoccio y cada Solsticio son momentos muy importantes porque experimentamos un punto de inflexión en el ciclo de la luz solar. Son los grandes hitos en el movimiento del Sol en relación a la Tierra, y es por eso que alrededor de estas fechas naturalmente se congregan una gran cantidad de celebraciones religiosas, ricas en símbolos y cultos, que nos recuerdan que somos hijos del Gran Creador : el Sol.
El Sol es el centro de nuestro sistema, fuente de toda la creación y vida en el Universo, el eje alrededor del cual giran los demás aspectos del Cosmos. El Sol es el Astro Rey, por eso sus ciclos y movimientos inspiran el culto y la veneración desde que la vida es vida.
La observación del Sol como máximo emblema de la Creación, revela leyes esenciales de la vida. Un tiempo para sembrar, un tiempo para cosechar, un tiempo para reunir, un tiempo para el descanso; tiempos donde había más energía, tiempos donde era menester conservar esta energía. El Tiempo es ritmo y sacrificio para estar en armonía con la ley del Cosmos, la manifestación del poder de la luz del Sol.
La historia del Sol es la historia de la Luz. Ahora, posándose sobre el Trópico de Capricornio, se produce el Solsticio de Verano en el Sur y de Invierno en el Norte, anunciando el cambio de temporada y generando la polaridad máxima entre la luz y la oscuridad, el día y la noche, el calor y el frío. Tiempo de cambio, de renovación energética en nuestro Cosmos y también en nuestra Psique. Tiempo de celebraciones y alabanzas al gran padre del sistema : El Sol.
La Luz del Sol y el Pensamiento Antiguo
El Sol es el centro del Sistema Solar, fuente de toda la creación y vida en el Universo, el eje alrededor del cual giran todos los Planetas y las energías del Cosmos.
Es el Astro Rey, el Padre del Cosmos, el Gran Creador, la fuente de luz y de vida, y sus ciclos y movimientos impactan en toda la Creación. Por eso, el simbolismo del Solsticio es clave para comprendernos mejor en nuestros cambios y ciclos, tanto a nivel individual como en el colectivo que somos.
Cada Equinoccio y cada Solsticio son momentos muy importantes porque experimentamos un punto de inflexión en el ciclo de la luz solar. Son los grandes hitos en el movimiento del Sol en relación a la Tierra, y es por eso que alrededor de estas fechas naturalmente se congregan una gran cantidad de celebraciones religiosas, ricas en símbolos y cultos, que nos recuerdan que somos hijos del Gran Creador : el Sol.
Desde la antigüedad, a partir de la observación de los ciclos naturales y de las relaciones entre la Tierra y el Cielo se construyeron una serie de principios éticos y hasta científicos. A través de la historia, muchos rituales y festivales se han organizado para celebrar este evento Cósmico.
“No ha habido ningún pueblo que no haya atravesado algún tipo de fase de simbolismo solar en su filosofía, ciencia y teología. El Sol ha dominado todas las artes, ha estado involucrado en todas las teorías de armonía musical. Encontramos registros de esto en todas partes porque el Sol representa la restauración anual de la vida, símbolo de la gran resurrección de todas las cosas existentes, la gran redención, la elevación de toda la vida de la oscuridad a la luz”. Manly P. Hall
La observación del Sol como símbolo central de la Creación, revela leyes fundamentales de la vida. Dentro de esta luz tenemos todas las leyes de la vida, y las leyes de la vida son los mandamientos, los métodos, el orden y la organización del tiempo, los principio a través de los cuales la vida logra la perfección. El Tiempo es ritmo y trabajo para estar en armonía con la ley del Cosmos, la manifestación del poder de la luz del Sol.
En la luz está todo el misterio matemático del Cosmos, como notó Newton al elaborar sus leyes de la física. La luz que viene de arriba es reflejada por todas las cosas, y esta ley nos permite conocer los ciclos del Sol con sus movimientos, su orden, ritmo y proyección, que permite que florezca la vida en nuestro Planeta Tierra. La luz, la vida y la ley.
Estos fundamentos también se pueden observar en la Astrología, y más aún en este evento que hoy vivimos, el Solsticio de Capricornio, momento en que el Sol hace su entrada a este signo regido por Saturno, Dios del Tiempo y la Agricultura, que representa arquetípicamente el orden, la ley, y la organización del tiempo y espacio material.
Solsticio de Capricornio : Verano en el Sur, Invierno en el Norte
Solsticio es una palabra que significa “sol quieto”y marca la máxima polaridad de la luz. En este sentido, cada 21 de Diciembre los rayos del Sol comienzan a caer directamente sobre el Trópico de Capricornio, produciéndose el Solsticio de Verano en el Hemisferio Sur y el Solsticio de Invierno en el Hemisferio Norte, el día más largo y la noche más corta del año en el Sur, y al revés en el Norte.
Los Equinoccios (21 de Marzo y 21 de Septiembre) y los Solsticios (21 de Junio y 21 de Diciembre) abren ciclos, las 4 estaciones del año, y a la vez son parte de un ciclo mayor de la vida en la Tierra: el viaje de traslación alrededor del Sol (1 año calendario).
El Solsticio de Verano marca el comienzo de un ciclo de apertura y expresión, de crecimiento, y a partir de ahora la luz del día comienza a disminuir diariamente, creciendo la oscuridad, hasta que el día y la noche se igualen en tiempo en el Equinoccio de Otoño.
El Solsticio de Invierno, en cambio, marca el nacimiento de un ciclo de la naturaleza en el cual comienzan a brotar las semillas, cambian el pelaje los animales, y el hombre y la tierra renuevan sus energías y se purifican. A partir del Solsticio de Invierno, la noche irá disminuyendo diariamente en un minuto, lo que irá haciendo “crecer” el día en la misma proporción, hasta que se produzca el Equinoccio que da paso a la Primavera.
Si estás en el Hemisferio Sur, estás dando la bienvenida al Verano. Si estás en el Hemisferio Norte, comienza el Invierno.
Es importante poder conocer y comprender el ciclo de las estaciones como el propio ciclo de nuestras vidas: en la primavera se nace, en el verano se crece, en el otoño se decrece y en el invierno se muere para renacer. Esta es nuestra propia naturaleza.
El Solsticio de Verano representa el momento de expresión y crecimiento, y desde este momento la noche irá creciendo mientras la luz del día decrece. En cambio el Solsticio de Invierno anuncia el renacimiento de la Luz, porque desde ese momento la noche irá disminuyendo haciendo que la luz del día se extienda cada día más.
Nuestro Planeta nos está pidiendo a la humanidad que retomemos ese entendimiento de unidad, ese grado de Conciencia donde la conexión con los ciclos de la Tierra, con los del Sol y la Luna sean sagrados para nuestra existencia. ¿Puedes observar esta necesidad de todos?
Necesitamos cambiar la mirada, transformar la imagen que tenemos de nosotros mismos, de nuestra relación con el entorno, y hacernos cargo de crear nuevas bases y conceptos universales que sustenten el equilibrio de la vida en la tierra. Perfilarnos y afianzarnos como constructores del cambio es lo que nos conduce a la sanación propia y la de nuestro mundo. Y la profunda y auténtica unión con el Cielo y la Tierra es la llave.
Entonces, te propongo un Ritual. Concéntrate en la respiración, sintiendo el equilibrio con cada inspiración y expiración: inhalando equilibrio; exhalando equilibrio. Simplemente eso, para observar así el poder que emerge para equilibrar la diferencia, articular la polaridad, y armonizar el presente. Mientras tanto, visualiza la llegada del Verano o del Invierno, según corresponda, como un ciclo de Crecimiento o Renacimiento en tu vida personal también.
Somos hijos del Sol, y todo lo que le pasa a nuestro Planeta nos pasa a nosotros. Al cuidar a la Tierra, nos ayudamos nosotros mismos. Y al cuidarnos a nosotros, cuidamos a la Tierra.
Feliz Solsticio!
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2 Comentarios
Me encantó! Gracias por compartir este conocimiento! De los blogs más interesantes! Un abrazo!
Muchas gracias, María! Un abrazo!!